El Departamento de Estado estadounidense advirtió a Irán sobre las consecuencias de la injerencia electoral después de que la campaña del expresidente y candidato republicano Donald Trump dijera que un adversario extranjero pirateó documentos.
“Estos últimos intentos de interferir en las elecciones estadounidenses no son nada nuevo para el régimen iraní, que, desde nuestro punto de vista, ha socavado las democracias -o lo ha intentado- desde hace muchos años”, dijo a la prensa el portavoz del Departamento de Estado, Vedant Patel.
Patel dijo que Estados Unidos ya había expresado en el pasado su preocupación por la actividad cibernética iraní.
“Seguimos teniendo una serie de herramientas para responsabilizar al régimen iraní, y no dudaremos en utilizarlas”, dijo Patel, quien sin embargo no confirmó si Estados Unidos había determinado que Irán estaba detrás del supuesto hackeo.
En la Casa Blanca, el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, John Kirby, remitió las preguntas sobre la responsabilidad al FBI y al Departamento de Justicia, pero apuntó a un informe de inteligencia anterior según el cual Irán “está trabajando para influir” en las elecciones presidenciales del 5 de noviembre.
El sábado, la campaña de Trump sugirió que Irán estaba detrás del intento de piratería informática en el que se enviaron a los periodistas documentos que incluían investigaciones que utilizaron para examinar a su compañero de fórmula J.D. Vance.