Las fuertes lluvias que azotaron desde el viernes a La Habana y otras ciudades del oeste de Cuba, provocaron la evacuación de centenas de personas, derrumbe total de edificaciones y cortes de electricidad y agua en algunas zonas, aunque sin dejar pérdidas humanas, informaron el sábado las autoridades.
“Se trabaja duro y todo se ha puesto en función de la recuperación en el menor tiempo posible. Pedimos prudencia a nuestro pueblo”, dijo el presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, en su cuenta de la red X. “Estamos siguiendo la situación generada en la capital por las intensas lluvias”, añadió.
En Diez de Octubre, un populoso municipio del oeste de La Habana, se desbordó el río Martín Pérez, dejando a algunos pobladores incomunicados, unas “762 personas autoevacuadas en casa de familiares y amigos” y 148 refugiadas en instalaciones públicas, informó el portal de noticias estatal Cubadebate.
Al menos 26 edificaciones se derrumbaron totalmente y unas 120.000 personas quedaron sin electricidad, agregó el medio.
La cantidad de lluvia que cayó en la capital “provocó inundaciones que, aunque están previstas en planes, superaron las expectativas de lluvia que teníamos previsto”, puntualizó Luis Antonio Torres Iribar, primer secretario del Partido Comunista de Cuba (PCC) en La Habana, en un mensaje publicado en la cuenta de la presidencia en X.
El funcionario aclaró que hasta ahora “no hubo ninguna pérdida de vidas humanas”.
Las precipitaciones estuvieron acompañadas de rachas de viento que en la capital alcanzaron hasta 75 kilómetros por hora, según fuentes oficiales. En algunas localidades aledañas a La Habana también se registraron granizadas.
“Hubo zonas que cayeron más de 300 milímetros en 24 horas y por supuesto entonces eso generó un grupo de afectaciones importantes en el sistema eléctrico con más de los 78 circuitos primarios afectados, los sistemas de acueductos afectados”, añadió el Torres Iribar.
Desde muy temprano este sábado Díaz-Canel encabezó una reunión con funcionarios locales para tomar las medidas necesarias que permitan afrontar los daños causados por este fenómeno climático.