Estados Unidos incluyó a 14 barcos petroleros rusos en una lista negra, en busca de que el límite al precio del crudo ruso que fue establecido por Occidente tras la invasión a Ucrania sea respetado.
Las sanciones, a un día de que se cumplan dos años de la invasión de Rusia a Ucrania, apuntan a la empresa pública rusa Sovcomflot, a la que da 45 días de plazo para descargar el petróleo y otros cargamentos de 14 de sus navíos.
Este tope de precios apunta a limitar los ingresos del gobierno ruso minimizando el impacto sobre los mercados energéticos.
“Hoy damos un paso más al apuntar a la mayor empresa naviera estatal rusa, dándole un duro golpe a sus operaciones encubiertas”, dijo el subsecretario del Tesoro, Wally Adeyemo, en un comunicado.
Una coalición que incluye al G7, la Unión Europea y Australia fijó un tope de 60 dólares por barril para el crudo de Rusia.
Una alta fuente del Tesoro que pidió el anonimato dijo a reporteros el viernes que el Kremlin logró eludir ese límite de precios al invertir en una “flota fantasma” para comerciar su petróleo.
Esta infraestructura paralela permite a Moscú ganar más dinero al vender cuando hay menos petróleo disponible.