El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, afirmó ante los dirigentes del G7 que Rusia estaba incrementando la presión en las líneas de frente con la expectativa de un rápido “desmoronamiento” de la ayuda occidental a su país.
“Rusia solo espera una cosa: que la unidad del mundo libre se desmorone el año próximo. Rusia considera que Estados Unidos y Europa se mostrarán débiles y no mantendrán su apoyo a Ucrania en el nivel apropiado”, declaró Zelenski en una videoconferencia con los mandatarios del G7 de las principales potencias occidentales.
Zelenski admitió que las fuerzas rusas estaban en plena ofensiva, pero aseguró que los soldados ucranianos “resisten” a los ataques.
Tras el fracaso de la contraofensiva estival ucraniana, las tropas rusas retomaron la iniciativa y tratan de rodear la gran ciudad industrial de Adviivka, en el este del país.
La ayuda militar y financiera a Ucrania, que le permitió a la exrepública soviética resistir a la invasión rusa desde febrero de 2022, está siendo cuestionada en Estados Unidos y en países europeos.
El presidente estadounidense, Joe Biden, advirtió este miércoles al Congreso que detener la ayuda a Ucrania sería el “mayor regalo” para el presidente ruso, Vladimir Putin.