El partido de repechaje entre Costa Rica y Nueva Zelanda, por el último boleto para el Mundial de Catar-2022, será histórico para muchos jugadores, aunque advirtieron que será “muy cerrado” por la capacidad física del rival.
“En el fútbol se dice casi siempre que el próximo partido es el más importante”, señaló el veterano volante costarricense Celso Borges, mundialista en Brasil-2014 y Rusia-2018.
Sin embargo, el duelo contra Nueva Zelanda “viéndolo de una manera fría está entre los más importantes de nuestras carreras”, agregó durante el segundo día de entrenamientos del combinado centroamericano en el estadio Al Sadd, en Doha.
A la concentración de Costa Rica se unió este jueves el defensor de Millonarios de Colombia, Juan Pablo Vargas, quien viajó aparte de sus compañeros tras salir del covid-19.
Costa Rica y Nueva Zelanda se disputarán el martes el último boleto para Catar-2022. Los ticos, que ya han participado en cinco Copas del Mundo, aspiran a disputar su tercer Mundial al hilo.
Para varios jugadores será su última oportunidad de estar en un Mundial, sobre todo, para la generación que logró en Brasil-2014 alcanzar los cuartos de final, entre ellos el propio Borges.
La cita ha provocado una gran expectativa en la hinchada del país centroamericano, aunque jugadores y técnicos han advertido de las dificultades para derrotar a los “kiwis”.
“Sé que ante Nueva Zelanda será un partido muy cerrado y será un cierre de vida o muerte, pero si hacemos un juego inteligente vamos a poder encontrar las espaldas de los contenciones para crear peligro”, afirmó el defensa Kendall Waston.
“Un equipo peligroso es el que sabe a lo que juega y esa es Nueva Zelanda, usan mucho el centro y remate, por lo que trataremos de llevarlos a un juego que no les convenga”, añadió Borges.
Ronald Gómez, asistente técnico del seleccionador, el colombiano Luis Fernando Suárez, manifestó este jueves que ha “costado” analizar al rival porque “ha variado mucho” su sistema de juego y sus alineaciones.
“Es un equipo peligroso, complicado, que juega bien, que tiene la pelota, que son grandes y fuertes, hay que tener mucho cuidado con Nueva Zelanda, no es como todo el mundo cree que le pueden meter cinco goles”, advirtió.