Miles de guatemaltecos exigieron la renuncia de la fiscal general, a quien acusan de persecución contra el presidente electo Bernardo Arévalo, al cumplirse una semana de protestas con bloqueos que empiezan a generar desabastecimiento de combustible y alza de precios de productos básicos.
Portando banderas guatemaltecas -azul y blanco-, una multitud protestó frente a la sede del Ministerio Público (Fiscalía) en la capital, mientras que otros miles mantenían cerradas, con camiones, automóviles, motocicletas y otros obstáculos, un centenar de tramos de carreteras en todo el país, estimó la policía.
“¡Fuera corruptos!”, “¡Fuera golpistas!”, “¡Renuncien!”, se lee en pancartas que llevaban manifestantes frente a la Fiscalía y otras instituciones estatales, mientras hacían sonar silbatos y cornetas de plástico.
Desde hace ocho días, se mantienen los bloqueos para exigir la salida de la fiscal general Consuelo Porras, el fiscal Rafael Curruchiche y el juez Fredy Orellana, luego de que éstos ordenaron allanar el tribunal electoral por presuntas anomalías en las elecciones disputadas en primera y segunda ronda, en junio y agosto pasados.
Respaldado por Estados Unidos, la Unión Europea y otros países y organismos internacionales, el opositor Arévalo considera que los tres funcionarios atentan contra la democracia y buscan evitar que asuma la presidencia el 14 de enero.
Arévalo, que este fin de semana cumplió 65 años, los acusa de liderar un “golpe de Estado en curso” por el temor de las élites del poder a su promesa de lucha contra la corrupción.
Las protestas fueron convocadas inicialmente por organizaciones indígenas del oeste de Guatemala y luego se unieron grupos universitarios, maestros, médicos y otros gremios de las ciudades.
– “Hasta que renuncie” –
Varios negocios, empresas y mercados cerraron sus puertas, lo que ya comenzó a provocar un desabastecimiento de verduras y de combustibles como gasolina y diésel.
Los precios de productos básicos como el tomate, frijol, la cebolla y las patatas se duplicaron o triplicaron. Aeronáutica Civil pidió a los manifestantes permitir el paso al transporte de combustible pues ya hay desabastecimiento para las aeronaves.
Policías han intervenido por conatos de violencia entre manifestantes y otras personas que se quejan de los bloqueos.
“No nos vamos a ir de aquí hasta que renuncie, hay gente que nos ha venido a apoyar, nos ha venido a dejar comida. La gente está bien unida”, dijo a la AFP en la exclusiva zona de Cayalá, periferia noreste de Ciudad de Guatemala, un manifestante que cubría su rostro con un pañuelo.
Pero la fiscal ha descartado en varias ocasiones renunciar y este lunes urgió a las fuerzas de seguridad actuar para desbloquear las vías, como lo dispuso la Corte Constitucional al acoger un recurso de amparo presentado por empresarios.
“Las manifestaciones pacíficas son un derecho, los bloqueos son un delito”, reclamó la funcionaria en un video difundido en redes sociales.
La fiscal, Curruchiche y Orellana, que también avalaron la inhabilitación del partido político de Arévalo, son considerados por Estados Unidos como “corruptos” y “antidemocráticos”.
“Ya es demasiado, el país ya se cansó de todo esto, queremos que renuncien (…) para que vuelva la normalidad”, declaró el taxista Gerson González.
“Es una manifestación pacífica, no permitamos más esta corrupción (…), nosotros (el pueblo) somos el poder de Guatemala para sacar a estos corruptos”, afirmó a la AFP otro manifestante, que prefirió el anonimato.
– ¿Estado de sitio? –
En una entrevista con la radio local Emisoras Unidas, Arévalo no descartó que la situación se salga de control si el gobierno decreta un estado de excepción.
“Lo que se busca es exacerbar las tensiones” y actos de violencia que sean usados “como excusa para declarar un estado de sitio (…), una suspensión de las garantías constitucionales y en ese marco cualquier cosa podría suceder”, advirtió.
El presidente electo aseguró que Porras y la Fiscalía actúan “con claro abuso de poder en violación del orden constitucional y con una clara intención de vulnerar el proceso electoral y democrático”.
El pasado fin de semana, la Corte Constitucional acogió un recurso de amparo para blindar la toma de posesión presidencial, pero los organizadores de las protestas señalan que están en un “paro indefinido” hasta lograr la renuncia de Porras.
Una misión de la Organización de Estados Americanos (OEA) llegaron la noche del domingo a Guatemala para mediar y buscar una solución al conflicto, según el gobierno.