La selección femenina española recibe el martes a Suiza (19h00 GMT) en un nuevo encuentro de la Liga de Naciones en casa, que tras el triunfo balsámico en Suecia puede servir para empezar a cerrar las heridas causadas por el beso forzado a Jenni Hermoso.
La Roja sorprendió el viernes con su victoria 3-2 sobre las suecas en Gotemburgo, tras una dura semana que había empezado con la convocatoria de jugadoras que se habían declarado no seleccionables y acabó con un triunfo que puso a la Selección líder del grupo 4 de la Liga A del torneo continental.
En medio, una reunión de jugadoras con Consejo Superior de Deportes (CSD) y Federación Española (RFEF), que sirvió para calmar las aguas después de que empezaran a atenderse sus demandas de cambios estructurales.
Entre estos, la RFEF cesó la pasada semana a dos altos cargos, que eran vistos como continuación del expresidente de la Federación, Luis Rubiales, cuyo beso forzado a Jenni Hermoso en la entrega de medallas del Mundial de Australia desató un escándalo internacional y causó el plante de las flamantes campeonas del mundo españolas.
– “Todo se ha ido calmando” –
“Los primeros días fueron agotadores, con el paso de los días todo se ha ido calmando, nos hemos focalizado en el fútbol que es lo que queremos”, dijo este lunes la centrocampista Aitana Bonmatí.
“Lo que queremos es ganar el martes, volver a ganar en octubre y estar en los Juegos Olímpicos en las condiciones que creemos que merecemos”, dijo su compañera Mariona Caldentey, en referencia a sus peticiones de condiciones de trabajo más igualitarias.
Su compañera Alexia Putellas había citado el domingo algunos agravios como que sus rivales viajaran en avión y ellas en autobús o traslados intempestivos sin apenas descanso como ejemplo de cambios que pedían junto a la defensa de Jenni Hermoso.
Putellas es una de las tres jugadoras que ha sido citada a declarar el próximo lunes como testigo por el juez que instruye la causa contra Rubiales por presuntos delitos de agresión sexual y coacciones por el beso a Jenni Hermoso.
El partido en Suecia comenzó con una gran pancarta sujetada por españolas y nórdicas con el mensaje “SeAcabó”, el lema usado durante las últimas semanas de las futbolistas españolas, contra agresiones y discriminaciones sexistas.
– “Dar un paso adelante” –
Las jugadoras españolas mostraron su apoyo a Jenni Hermoso con unas vendas como muñequeras en las que se podía leer “Se acabó”, “Jenni” o “10”, el número de la futbolista del Pachuca, no convocada en esta ventana internacional.
“Estos días han sido más tranquilos, tienen ganas y estamos preparadas para afrontar el partido de mañana”, afirmó este lunes la seleccionadora española, Montse Tomé.
“Hemos logrado hablar, mirarnos, ser sinceras y dar un paso adelante”, añadió Tomé, quien descartó que se sienta cuestionada por sus jugadoras.
“Eso nunca lo sentí así, nunca sentí que eso fuera algo que se solicitaba (su salida)”, aseguró la seleccionadora española.
Arropadas por el público extranjero hace unos días, las españolas podrán sentir ahora el apoyo de su público en el estadio Nuevo Arcángel cordobés, el mismo que han tenido durante estas duras semanas en los mensajes en redes sociales.
“Hay muchísima gente que está pendiente de nosotras. Estamos super agradecidas”, afirmó Caldentey, animando al público a acudir al Nuevo Arcángel.
La Roja encara el encuentro con bastante más ánimo que el que afrontó el viernes en Gotemburgo, frente a una selección suiza que llega necesitada de victoria tras perder contra Italia 1-0 el viernes pasado.
Las helvéticas, últimas de grupo, que ya no habían podido contar para esta convocatoria con su estrella Ana-Maria Crnogorcevic por lesión, perdieron el viernes a otra de sus figuras, Ramona Bachmann, por una lesión en el pie sufrida en el partido contra Italia.