Cuatro letreros que amenazan con asesinar al cantante mexicano de corridos tumbados Peso Pluma si se presenta en octubre en Tijuana fueron colocados en diversos puntos de esa ciudad, fronteriza con Estados Unidos, informaron este martes las autoridades.
La alcaldesa de Tijuana, Montserrat Caballero, detalló que la fiscalía local investiga si los carteles fueron colocados por bandas del crimen organizado o por alguna otra persona, y evaluará si las amenazas ameritan cancelar el concierto del artista, que admite haber escrito canciones “por encargo” de narcotraficantes.
“A mí me corresponde proteger a la ciudadanía tijuanense y por lo mismo en los próximos días vamos a determinar si se lleva a cabo el concierto o no”, dijo Caballero a periodistas.
El espectáculo del autor del éxito “Ella baila sola” está previsto para el 14 de octubre.
Medios difundieron la imagen de al menos uno de los carteles con amenazas al cantante, de 24 años, el cual está firmado con la sigla “CJNG”, correspondiente al Cártel Jalisco Nueva Generación, una de las mafias narco más poderosas de México con presencia en varios países.
Caballero informó que la policía ya detuvo a una persona vinculada con la colocación de los letreros y que “hasta este momento” el equipo del artista no se había puesto en contacto con la alcaldía.
Peso Pluma, nombre artístico del cantante Hassan Emilio Kabande Laija, sobresale por ser el primer mexicano en haber colocado casi una decena de canciones entre las 100 más populares de Estados Unidos, según la revista Billboard, y en el Top 50 global de Spotify, referentes de la industria musical.
El artista, que en junio pasado grabó una colaboración con el argentino Bizarrap, aparece en varios videos vistiendo costosa ropa de diseñador y exhibiendo armas largas. Al menos en uno de ellos celebra directamente al también dominante cártel de Sinaloa.
“Sabemos que los cantantes como (…) Peso Pluma hacen apología del delito, entonces hay ciertos grupos que se molestan y lamentablemente quienes sufren las consecuencias son los ciudadanos al querer asistir a sus conciertos y tener un riesgo”, agregó la alcaldesa.
Caballero descartó, sin embargo, la posibilidad de prohibir en Tijuana los conciertos o la difusión de los llamados narcocorridos, al señalar que los padres de familia son los principales responsables de la popularidad del género entre los jóvenes.
“No basta solo con apagarles la música, sino saber por qué se están viendo proyectados en esas canciones”, sostuvo.