Después de su accidentado debut, el tenista español Carlos Alcaraz firmó la noche del jueves su primera exhibición en el Abierto de Estados Unidos, en una jornada en que también avanzaron otros pesos pesados como Daniil Medvedev y Jannik Sinner.
En el segundo paso de su defensa del título, Alcaraz venció al sudafricano Lloyd Harris, número 177 de la ATP, por 6-3, 6-1 y 7-6 (7/4) en dos horas y 27 minutos de juego.
El español, de 20 años, pugnará por un lugar en los octavos de final contra el británico Daniel Evans, número 28 del ranking mundial.
El martes, Alcaraz tuvo que esforzarse una hora hasta que su rival, el alemán Dominik Koepfer, se retiró por lesión.
El jueves, el prodigio español brindó un mayor espectáculo a los aficionados de la pista central Arthur Ashe, la mayor del mundo, que lo han adoptado como uno de los suyos.
Aunque firmó golpes que levantaron a la grada, Alcaraz brilló especialmente escapando de las emboscadas que trató de tenderle Harris, sobre todo con su único quiebre en el tercer set.
“Ganar en sets corridos es muy importante para mí en las primeras rondas”, se felicitó Alcaraz.
A sus 20 años, el español aspira a ser el primer campeón en revalidar trofeo desde Roger Federer en 2008.
“Sería increíble poder compartir ese logro con Federer, vamos a intentarlo”, reconoció en la conferencia de prensa.
Su gran rival para esa gesta es Novak Djokovic, ya asentado también en la tercera ronda y con un recorrido teóricamente más asequible por la caída de figuras de su cuadro como Holger Rune o Casper Rudd, finalista del año pasado.
En menos de dos meses Alcaraz venció a Djokovic en la final de Wimbledon y cayó en la del Masters 1000 de Cincinnati. Ahora su deseo es repetir la pelea por el US Open ante el serbio.
“Tanto para los fans del tenis como para mí también, ojalá jugar una final aquí contra él”, Djokovic, subrayó.