La autoridad electoral de Ecuador aprobó por unanimidad el miércoles por la noche la candidatura del periodista Christian Zurita para la elección presidencial de este domingo, en reemplazo del centrista Fernando Villavicencio, quien fue asesinado a tiros hace una semana al salir de un mitin en Quito.
“Por unanimidad y con base en el informe puesto a nuestra consideración, calificamos la candidatura presidencial de @christianzr , auspiciado por el Movimiento @Construye_Ecu , para participar en las #EleccionesAnticipadas2023Ec”, expresó la titular del Consejo Nacional Electoral (CNE), Diana Atamaint, a través de la red X (antes Twitter).
El organismo señaló en un comunicado que “negó la objeción presentada en contra de la postulación, por cuanto el candidato no se encuentra afiliado o adherido a ninguna organización política. En consecuencia, se aprobó la calificación de su candidatura, luego de verificar el cumplimiento de los requisitos dispuestos en la normativa electoral vigente”.
Previamente a la aprobación de la candidatura de Zurita, de 53 años, el mismo CNE dio vía libre a sus aspiraciones presidenciales al desestimar un recurso que presentó la fuerza izquierdista del exmandatario Rafael Correa (2007-2017) para impedir su postulación.
El correísmo aseguraba que Zurita aparecía inscrito con el partido centroderechista Renovación Total (Reto) y no con Construye, que da el aval presidencial, por lo que incurría en doble militancia.
El rostro de Villavicencio, no obstante, será el que aparecerá en las papeletas electorales en lugar del de Zurita, dado que las boletas ya se imprieron, informó el CNE.
– “Intenta silenciarnos” –
Zurita sostuvo que un documento que lo vinculaba con Reto era falso porque su firma no era la verdadera, por lo que pidió al CNE quitarle validez de cara a la primera vuelta del domingo.
La entidad le dio la razón y aceptó “la nulidad” solicitada por Zurita, según dijo a la prensa Atamaint.
El supuesto conflicto de Zurita le hubiese impedido ser aspirante al poder por violación de las normas electorales.
El “correísmo nuevamente intenta silenciarnos, confirma su temor a nuestra candidatura”, señaló más temprano en X el movimiento Construye, el partido de centro al que pertenecía Villavicencio, segundo en la intención de voto antes de su muerte con 12,5%, por debajo del 24% de la correísta Luisa González, según la más reciente encuesta de la firma Cedatos.
Desde el puerto de Guayaquil (suroeste), Zurita celebró en la mañana el dictamen del CNE: “Estamos a pocas horas de que se oficialice la candidatura de Christian Zurita y Andrea González Nader”, su fórmula a la vicepresidencia.
También periodista y crítico del correísmo como Zurita, Villavicencio fue asesinado a tiros por un sicario colombiano el miércoles pasado al salir de un mitin en el norte de Quito.
Antes del crimen, acusó al detenido líder de la banda criminal “Los Choneros” (aliado del cartel mexicano de Sinaloa) de haberlo amenazado de muerte.
Con chaleco y casco antibalas y protegido por policías, el ahora presidenciable visitó el miércoles el sitio donde fue asesinado su amigo Villavicencio.
“En este momento de profundo pesar, nos reunimos para honrar la memoria de Fernando, un líder apasionado y comprometido cuyo legado perdurará en el tiempo. Su incansable dedicación a nuestro país y sus valores resonarán en cada paso que demos hacia un futuro mejor”, manifestó por X.
– Las mafias le temen –
Cuando era miembro de la Asamblea Nacional disuelta en mayo por el mandatario Guillermo Lasso, medida que dio paso a las elecciones anticipadas, también presentó una denuncia ante la fiscalía contra un grupo de parlamentarios, entre ellos correístas, que aparentemente estaban involucrados en un plan para asesinarlo.
Construye, que presentó la candidatura de Zurita el pasado domingo, expresó en la red X que “la reacción vil y desesperada del correísmo en todos los días posteriores al asesinato (de) Fernando, incluida esta impugnación, es la confirmación de que somos la candidatura más temida por las mafias”.
Debido a que no estaba habilitado como presidenciable, Zurita no pudo participar en el debate oficial de ese mismo domingo por la noche, en el que intervinieron los otros siete aspirantes al ser obligatorio.
Villavicencio, un acérrimo opositor al correísmo, era un periodista de investigación. Uno de sus trabajos junto a Zurita llevó a Correa, quien vive en Bélgica desde que dejó el poder en 2017, a ser condenado en ausencia a ocho años de prisión por corrupción.
En 2011, el exmandatario demandó a Zurita y su colega Juan Carlos Calderón por daño moral ante la publicación de un libro que revelaba contratos irregulares de su hermano mayor Fabricio. El caso fue archivado por pedido de Correa luego de que un juez les ordenó pagar dos millones de dólares.