Rusia anunció que había neutralizado cinco drones ucranianos cerca de Moscú y en su región, una acción que afectó el funcionamiento del aeropuerto internacional de Vnúkovo y que la diplomacia de Moscú calificó de “acto terrorista”.
El ataque estaba dirigido a distintos lugares en la región de Moscú y sus alrededores, unas zonas que raramente han sido blanco de las acciones de Kiev que, por otro lado, se han multiplicado en otras partes de Rusia.
Según el ministerio de Defensa ruso, cuatro drones fueron destruidos por la defensa antiaérea cerca de la capital rusa y el quinto fue neutralizado por “medios de guerra electrónica” antes de caer en la región de Moscú.
El ataque no provocó ni víctimas ni daños, agregó el ministerio, que definió la acción como “un acto terrorista”.
“Todos los ataques fueron repelidos por la defensa antiaérea, todos los drones detectados fueron neutralizados”, celebró en Telegram el alcalde de Moscú, Serguéi Sobianin.
La acción perturbó durante tres horas la operativa en el aeropuerto de Vnúkovo, uno de los tres grandes aeropuertos internacionales de Moscú.
Según los servicios de socorro citados por la agencia de prensa pública RIA Novosti, uno de los drones fue neutralizado cerca de Kubinka, a unos 40 kilómetros del aeropuerto moscovita de Vnúkovo.
Varios vuelos tuvieron que ser desviados a otros destinos durante la madrugada hasta que el aeropuerto “retomó su trabajo” a las 05H00 GMT, dijo la agencia rusa de transporte aéreo Rosaviatsia.
La agencia de noticias estatal TASS señaló que un dron había sido abatido en la región de Kaluga, al suroeste de Moscú.
Después del ataque, la cancillería rusa denunció un “acto terrorista” de Kiev, dirigido contra una zona “donde están situados sitios de infraestructura civil”, declaró en Telegram su portavoz María Zajárova.
La vocera también acusó a los países occidentales de financiar “un régimen terrorista” al estar suministrando armas a Kiev.
– Problemas en la contraofensiva ucraniana –
En Ucrania, el gobernador de Jersón, Oleksander Prokudin, informó en Telegram que dos personas murieron por bombardeos de artillería rusos en esta región del sur del país.
También se registraron tres heridos en la región de Donetsk (este) y otros tres en la de Chernígov (norte), según las autoridades locales.
Además, el balance del ataque con drones de Rusia que en la víspera impactó un edificio residencial en Sumy (noreste) aumentó a tres muertos y 21 heridos.
El Estado Mayor de Ucrania informó también de la intercepción de 16 drones de fabricación iraní lanzados por Rusia durante la noche.
En el frente, los combates continúan casi un mes después de que Kiev lanzara una contraofensiva para recuperar los territorios ocupados por Rusia que, hasta el momento, solo le ha reportado avances moderados.
Según el ministerio británico de Defensa, las fuerzas ucranianas se topan en su intento de avanzar con el “uso masivo de minas antitanque por parte de Rusia” y con ataques de aviación, helicóptero y artillería.
Las fuerzas rusas “han obtenido algunos éxitos con esta estrategia” pero continúan “sufriendo importantes debilidades”, estimó.
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, reconoció el lunes que llevaban una semana de “difíciles” combates en toda la línea del frente. Aun así, sus tropas consiguieron avanzar 37 km2 en el este y el sur.
De su parte, Rusia asegura que el ejército ucraniano “no alcanzó sus objetivos en ninguna línea” desde el inicio de su contraofensiva a principios de junio.
En el frente diplomático, el presidente ruso, Vladimir Putin, participó en una cumbre virtual de la Organización de Cooperación de Shanghái (OCS), de la que su país participa con China, India, Pakistán y cuatro repúblicas centroasiáticas.
Putin aseguró que su país “seguirá resistiendo” frente a “presiones externas” y las “sanciones” impuestas por los países occidentales desde el inicio de su operación en Ucrania en febrero de 2022.
También agradeció a sus “colegas de la Organización de Cooperación de Shanghái que expresaron su apoyo” durante la rebelión del grupo paramilitar Wagner que sacudió al Kremlin a finales de junio.