El entrenador de la AS Roma, José Mourinho, podrá finalmente sentarse en el banquillo contra la Juventus, el domingo, gracias a la congelación provisional de su suspensión para dos partidos consecutivos tras su expulsión contra la Cremonese.
El tribunal de apelación de la Federación Italiana de Fútbol anunció una ampliación de la investigación sobre las condiciones de la expulsión del técnico luso, el martes en Cremona, y mientras tanto decretó la suspensión de la aplicación de la sanción. Una nueva audiencia examinará los hechos el próximo viernes.
Mourinho había recibido el miércoles una multa de 10.000 euros y una suspensión de dos fechas luego de haber protestado ostensiblemente una decisión arbitral durante la sorprendente derrota de la Roma ante la Cremonese (2-1).
La comisión de disciplina de la liga italiana informó asimismo que Mourinho entró en el vestuario de los árbitros después del partido “sin autorización”.
Pero la Roma reclamó una suspensión de la sanción al considerar, según los medios, que su técnico habría sido provocado por el cuarto árbitro.
La Roma, en quinta posición en la Serie A, recibe el domingo en la 25ª fecha de la Juventus, séptima a nueve puntos de los Giallorossi (clasificación teniendo en cuenta su sanción de quince puntos por fraudes contables, contra la que interpuso recurso).