Infierno en la salida a Olancho

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Con quema de llantas, el tramo del kilómetro siete de la carretera que de la capital conduce a Olancho, fue tomado ayer por parte de transportistas y pobladores de zonas aledañas que protestaban para exigir la reparación de esta vía.

Luego de más de cinco horas de obstruir el paso vehicular, los manifestantes llegaron a un acuerdo con las autoridades, las que se comprometieron a acelerar los trabajos de reparación de la carretera a partir del próximo lunes 6 de marzo.

La toma inició a eso de las 5:00 de la mañana, en el sector en mención, hasta donde llegaron las autoridades de la Policía Nacional para liberar el paso y con tanquetas con agua apagar las llantas en llamas colocadas en la calzada.

También participaron en la protesta transportistas en la zona del Mall Premier y del punto que conecta la colonia Cerro Grande, en Comayagüela, con la bajada del barrio El Chile, en Tegucigalpa.

Durante la protesta, transportistas y pobladores de zonas aledañas que circulan a diario por la carretera, lamentaron que esta se encuentra en severo deterioro, desde la altura de la colonia Cerro Grande hasta más o menos el kilómetro 10.

A la toma de la vía se sumaron las unidades de rutas como la Miller, Río Abajo, Talanga, Guaimaca, Cerro Grande, entre otros sectores cercanos.

Según autoridades del gobierno, para mejorar el tránsito vial en la zona, se ejecutará un proyecto de pavimentación de la carretera con concreto hidráulico, desde la rotonda de la colonia La Laguna, hasta el kilómetro 7.2, en la aldea El Guanábano. En el pavimento se usará concreto hidráulico de 23 centímetros de espesor, para garantizar la calidad.

“La calle está destruida y uno tiene que buscar medidas para ser escuchado, queremos dialogar y ser escuchados, si tienen el presupuesto, ¿por qué no ejecutan el proyecto?”, reclamó uno de los conductores. Otro denunció que ya no pueden transitar ni en motocicleta, sobre todo en horas de la noche, debido a que, sin la visibilidad correcta, aunado al mal estado de la calle, la calzada se convierte en una “trampa” mortal.

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