A pesar del titánico esfuerzo de Giannis Antetokounmpo, los Milwaukee Bucks cedieron este domingo su corona de la NBA al ser barridos 109-81 por los Boston Celtics, que buscarán la revancha ante los Miami Heat en las Finales del Este.
Los 25 puntos, 20 rebotes y 9 asistencias de Antetokounmpo fueron insuficientes para evitar la eliminación de los Bucks en el séptimo y definitivo partido de las semifinales del Este en el TD Garden de Boston.
El ala-pívot Grant Williams fue la figura inesperada de los Celtics con 27 puntos y el alero Jayson Tatum aportó otros 23.
A partir del martes, Boston podrá saldar cuentas pendientes con los Heat de Jimmy Butler y Bam Adebayo, equipo que les eliminó en las Finales del Este de 2020 en la sede “burbuja” de Disney World.
Aquel fue el tercer intento fallido en cuatro años de los Celtics por alcanzar las Finales de la NBA, que no disputan desde 2010.
El domingo, la eliminatoria más espectacular de estos playoffs tuvo un desenlace mucho más abultado de lo previsto en favor de Boston.
Los locales aprovecharon su espectacular eficacia desde el tiro exterior con 22 triples convertidos, la mayor cifra en un séptimo partido de playoffs y en cualquier juego de postemporada de los Celtics.
Los Bucks, que pudieron resolver la serie el viernes en su cancha, naufragaron desde la larga distancia con 4 triples de 33 intentos, como colofón de una nefasta actuación ofensiva colectiva.
Milwaukee pagó muy cara la ausencia del escolta All-Star Khris Middleton, quien se perdió toda la eliminatoria por una lesión de rodilla.
Segundo máximo anotador del equipo, Middleton fue un jugador decisivo en el campeonato logrado el año pasado por los Bucks, que acabó con medio siglo de sequía de títulos para la franquicia.
“Fueron mejor equipo en la serie de siete partidos. Hay que dar crédito a Boston”, dijo el técnico de Bucks, Mike Budenholzer. “En la NBA tienes que tener buenos jugadores, un poco de suerte y salud. Necesitas estas tres cosas para ganar en playoffs. Nosotros no estuvimos sanos pero a nadie le va a importar”.
Con la salida de los Bucks, la NBA tendrá un nuevo campeón por cuarta temporada consecutiva.
– Histórico Antetokounmpo –
Antetokounmpo, por su parte, se quedó sin el ansiado segundo anillo pese a su actuación histórica en estos playoffs.
El griego, dos veces MVP de la liga, fue ante los Celtics el primer jugador en alcanzar al menos 200 puntos, 100 rebotes y 50 asistencias en una serie de playoffs.
“Estoy orgulloso de los chicos, del esfuerzo que hicieron, tuvimos oportunidades de ganar”, dijo Antetokounmpo.
“Obviamente si hubiéramos tenido a Khris, probablemente hubiera sido una historia diferente pero no lo tuvimos”, señaló. “Pero no quiero poner excusas, tenemos que mejorar como equipo”.
El domingo, el griego se cargó a su equipo a las espaldas en un memorable primer cuarto en el que anotó o asistió en los primeros 22 puntos de los Bucks (10 puntos y 6 asistencias).
Los Bucks resistían gracias al aporte ofensivo del pívot Brook Lopez (15 puntos y 10 rebotes) pero se comenzaba a anticipar la funesta actuación de los tiradores de Milwaukee.
Entre el base Jrue Holiday y los escoltas Wesley Matthews, Grayson Allen y Pat Connaughton no convirtieron un solo triple de 18 intentos.
Del otro lado, Tatum seguía enrachado como en el juego del miércoles, cuando logró 46 puntos, y anotó sus cuatro primeros triples.
Los Celtics aceleraron a la vuelta del vestuario con el secundario Grant Williams como inesperada arma ofensiva. El ala-pívot, que había anotado 2 puntos en los dos partidos anteriores combinados, explotó los espacios que le concedieron los Bucks para lograr 7 triples y 27 puntos, ambos récords de su carrera.
“Le dije que siguiera (tirando). Le dije: ‘Esta noche te están faltando al respeto más que al principio de la serie”, explicó después el técnico de Celtics, Ime Udoka.
El ala-pívot es el tercer jugador que consigue 7 triples en un séptimo partido de playoffs, acompañando a Stephen Curry y Marcus Morris.
“Grant nos ganó un partido de playoffs hoy”, le reconoció Tatum. “En playoffs necesitas tipos que salgan del banquillo para ser estrellas en su rol”.
“Es una gran sensación. Perder el quinto partido fue duro pero no puedo estar más orgulloso de cómo respondimos hasta lograr esta victoria”, dijo el alero, quien se está reivindicando en estos playoffs como una nueva superestrella de la liga.
Con Giannis exhausto y sin ayuda, los Bucks vieron cómo los Celtics llegaron a tener una ventaja de 27 puntos en un último cuarto convertido en una fiesta para los 19.000 aficionados del TD Garden.