Los oficiales activos y en condición de retiro, emitieron un comunicado, preocupados por la situación política que vive Honduras, ya que han servido con dignidad oponemos a que los políticos intervengan en asuntos establecidos por las leyes militares. El comunicado, dice así:
Nosotros Oficiales activos y en orgullosa condición de retiro, preocupados por la situación política que vive en el país y especialmente por la forma como el poder político quiere instrumentalizar a las Fuerzas Armadas, a nuestros compañeros de armas y a la ciudadanía en general, manifestamos los siguiente:
- Que nuestra Institución es depositaria de honor y sacrificio al servicio de los hondureños y residentes extranjeros; porque nuestra razón de ser es defender la integridad territorial y la soberanía de la República, mantener la paz, el orden público y el imperio de la Constitución, los principios de libre sufragio y la alternabilidad en el ejercicio de la Presidencia de la República; según reza el Artículo 271 de la Constitución de la República de Honduras vigente.
- Históricamente hemos servido con dignidad y lealtad a nuestros compatriotas, especialmente a las autoridades civiles, acompañándolas y resguardando su seguridad. Las acciones en defensa de los intereses patrios, no siempre han tenido un final feliz para cada uno de los sectores de Honduras. De manera que, si el producto es un éxito, el mérito es de los políticos; sin embargo, cuando resulta un desastre, la responsabilidad se imputa a nosotros los militares. Sin que nadie nos defienda siquiera. Los políticos son poco éticos, y su carácter principal es el uso de la voluntad de los demás en su beneficio personal o grupal. Le respetamos porque son elegidos por el pueblo; pero no les obedecemos si nos dan ordenes fuera de la ley y la ética militar.
- Somos soldados y ciudadanos, al servicio de Honduras, al Estado de derecho, soberano, constituido para asegurar a sus habitantes el goce de la justicia, la libertad, la cultura y el bienestar económico y social, y como tales, nuestro deber y derecho, es apoyar todo aquello que beneficie a nuestro pueblo querido.
- El Plan de Refundación, implica el fin de numerosas instituciones democráticas tal y como las conocemos, porque todo apunta al cambio del ordenamiento jurídico existente con una nueva constitución, cuyos términos no están bien definidos. Entre las que podría incluirse la independencia o desaparición de la institución militar lo que, entre otras cosas, pondría en peligro la autonomía del Instituto de Previsión Militar que, hasta ahora ha provisto los medios para un retiro digno a los miembros de las FFAA. Igualmente rechazamos la pretensión de convertirnos en una sucursal del partido al frente del gobierno.
- Consideramos que el Plan de Refundación atenta contra las garantías ciudadanas en general y nuestras pensiones en particular, lo que abarca tanto a las actuales promociones en servicio activo, como a los futuros integrantes y personal en retiro. Por lo tanto, rechazamos tal plan porque es inconstitucional y porque afecta nuestros intereses.
- Finalmente ratificamos que nos oponemos a que los políticos intervengan en asuntos establecidos por las leyes militares, referidos a los ascensos por antigüedad y méritos, porque ello hace que los peores oficiales ocupen posiciones que corresponden a los más capaces y hábiles para la defensa de la Patria y sus instituciones. Porque con tales prácticas se debilita la capacidad de combate de una institución que, ha sido creada para defender al pueblo, a la democracia y a garantizar la integridad del territorio nacional.
- Por ello, seguiremos vigilantes y dispuestos a compartir con nuestro pueblo y los medios de comunicación social, nuestras opiniones que no firmamos para no ser objeto de represalias. Estamos firmes y convencidos que la existencia de la nación hondureña, está basada en la existencia de unas Fuerzas Armadas independientes, sin interferencia política y sin abusos partidaristas en contra de la dignidad de sus oficiales.
- Tegucigalpa 17 de enero de 2023
- OFICIALES DEFENSORES DE LA INSTITUCIONALIDAD Y LA INDEPENDENCIA DE HONDURAS (ODIIP—23)