TOCOA, Colón. – Los testigos lo describen como una lluvia de balas lo que vivieron pacientes y familiares, cuando un encapuchado descargó un arma de alto poder sobre un hombre, que aguardaba entrar a ver a su familiar enfermo.
El hecho ocurrió en el hospital San Isidro, en Tocoa, en donde el informe preliminar de la policía indica, que el fallecido estaba sentado en una de las bancas, a la espera de que le dieran pase de entrada, ya que tiene una familiar enferma.
Pero como a las 4:00 de la tarde, un sujeto logró burlar la seguridad y entró a dispararle al hombre, sin mediar palabra, dejando casi 32 casquillos de bala sobre el piso.
Las autoridades esperaban a medicina forense, así como a familiares para que identificaran el cadáver, que quedó sentado sobre una banca de madera.