Miembros de un grupo de alto nivel de la Organización de los Estados Americanos (OEA) empezaron a llegar a Perú para analizar la crisis política en el país, donde el presidente Pedro Castillo es investigado por presunta corrupción.
La misión, aprobada en octubre por el Consejo Permanente de la OEA, fue enviada a pedido del mandatario izquierdista.
“Con todos nos vamos a reunir”, dijo a la prensa el paraguayo Eladio Loizaga, representante de la secretaría general de la OEA.
“Ya lo expresamos en nuestro comunicado del día de ayer (sábado) sobre todo lo relativo a la visita que va a hacer la misión encomendada por el Consejo Permanente y por todos los Estados miembros de América y El Caribe”, agregó Loizaga tras arribar al aeropuerto limeño.
El grupo de alto nivel que permanecerá hasta el miércoles tiene programado reunirse desde el lunes con miembros de los poderes ejecutivo, legislativo y judicial y organizaciones civiles.
“Vamos a escuchar al gobierno y a la oposición, vamos a escuchar a representantes religiosos, sindicales, empresariales, profesionales y a la sociedad civil”, dijo el sábado Loizaga en un mensaje de video en la cuenta de Twitter de la organización.
La OEA “ha expresado su disposición a brindar apoyo y cooperación al requerimiento de Perú, a través de gestiones que promuevan el diálogo y fortalezcan el sistema democrático de gobierno”.
Además de por Loizaga, la misión está compuesta por los cancilleres de Argentina, Santiago Cafiero; de Ecuador, Juan Carlos Holguín; de Guatemala, Mario Adolfo Búcaro; de Paraguay, Julio César Arriola; de Costa Rica, Arnaldo André; y de Belice, Eamon Courtenay; así como por la viceministra de Asuntos Multilaterales de Colombia, Laura Gil.
“Constitucionalmente existe el equilibrio de poderes y eso queremos explicar a la OEA, que nos ayude a fortalecer el campo democrático del país, pero sobre todo que en el Perú se respeten los tiempos democráticos, creo que eso es fundamental”, dijo a la prensa el ministro de Trabajo y Promoción del Empleo, Alejandro Salas.
Castillo, en el poder desde julio de 2021, ya ha enfrentado dos intentos de destitución en el Congreso -dominado por la derecha- y ha sido sometido a seis investigaciones fiscales por presunta corrupción, de la que también se acusa a su círculo familiar y político más cercano. Se considera víctima de una campaña para sacarlo del poder y denuncia un “golpe de Estado”.